
Durante los meses comprendidos entre mayo y diciembre de 2020, el 14,43% de las viviendas ofertadas en España han registrado una bajada media en el precio del 8,56%.
Así lo refleja el infome elaborado por el Departamento de Estudios de CoHispania, que analiza la oferta de vivienda en España, en base al estudio que se ha ido realizado mensualmente, desde el pasado mes de mayo hasta diciembre de 2020, de anuncios de oferta de vivienda y la base de datos de CoHispania basada en la actividad durante este período, siempre referente al precio de oferta de la vivienda: aquel por el que quieren ser vendidas.
La provincia con mayor porcentaje de viviendas rebajadas respecto al total de la oferta disponible ha sido Soria, donde el 18,91% del total de las viviendas ofertadas han registrado bajadas de precio durante estos meses. A continuación le siguen Lleida (18,38%) y Murcia (17,8%). Por el contrario, las provincias con menor porcentaje de viviendas rebajadas corresponden a las provincias de Córdoba (10,71%) y la ciudad autónoma de Melilla (8,48%).
En cuanto al precio, las provincias que registran una mayor bajada en el precio de oferta han sido Almería, Lleida y Teruel, todas con un descenso medio del 12% en aquellos inmuebles que han sufrido una alteración a la baja en los precios.
Respecto a las provincias que cuentan con las ciudades más pobladas de España, Madrid y Barcelona, el porcentaje de viviendas rebajadas durante todo el período estudiado ha sido del 16,48% en el caso de Madrid y 16,66% en la ciudad condal. En concreto, Barcelona ha sufrido una bajada media de precio de oferta del 7%. Por su parte, en Madrid, el precio de las viviendas que han registrado bajadas en el precio de oferta, ha disminuido una media del 6%.
El porcentaje de viviendas ofertadas en España que han visto rebajado su precio respecto al mes anterior, ha pasado del 6,85% entre los meses de mayo y junio (mes en el que terminó el estado de alarma) al 4,28% en diciembre respecto a noviembre.
En cuanto al precio, se observa cómo en junio, mes en el que finalizó el estado de alarma, el precio medio de oferta de las vivienda que han sufrido bajadas en el mismo, cayó un 9,28% respecto a mayo, el mayor descenso en todo el período analizado. En el mes de diciembre, el descenso del precio medio fue del -6.26% (un 1,42% menos que en Junio).
Comportamiento del total de la oferta
Comparando el total de las viviendas ofertadas durante los meses de mayo y diciembre, se observa un aumento del precio medio de oferta del 5%, pasando de los 1.667 €/m² en mayo a 1.751 €/m² al cierre de 2020.
Las provincias más caras para comprar una vivienda entre mayo y diciembre han sido Guipúzcoa (3.206 €/m²), Baleares (2.933 €/m²) y Vizcaya (2.751 €/m²). Le siguen las grandes ciudades, Madrid y Barcelona, con 2.741 €/m² y 2.668 €/m² respectivamente. Por su parte, las provincias más económicas, han sido Toledo (766 €/m2), Ciudad Real (768€/m²), Teruel (818 €/m²) y Cuenca (819 €/m²).
A pesar de que en todas las provincias un determinado porcentaje de viviendas han registrado bajadas de precio, no en todas el precio global, el del 100% de las viviendas en venta, ha disminuido. Se aprecia un crecimiento desigual de precio entre provincias, que ya se observaba en los meses anteriores a la pandemia, lo que pone de manifiesto una España a dos velocidades. Así, entre mayo y diciembre, de las 52 provincias analizadas, 37 provincias han visto crecer sus precios, mientras el resto han mostrado un comportamiento descendente.
Los mayores subidas en el precio de oferta del total de viviendas en venta se han registrado en Baleares (+10,7%), Jaén (+8,5%) y Guipúzcoa (+7,4%) y los mayores descensos en Huesca (-13,4%), Soria (-6 %) y Teruel (-4,8 %).
La superficie media de la vivienda en oferta en España entre mayo y diciembre ha sido de 129,4 m². El piso es la tipología de vivienda más ofertada, en concreto el 70,2% son viviendas plurifamiliares frente al 29,8% que son unifamiliares. La tipología apenas ha variado entre mayo y diciembre: se ha producido un ligero incremento de oferta de vivienda plurifamiliar de 1,5 puntos porcentuales y el correspondiente descenso de viviendas unifamiliares.